Skip to main content

Suele pasar nos que los alumnos nos llegan con muchas dudas sobre cómo desarrollar un proceso creativo con su equipo y que llegue a buenos resultados.

Para esto, hemos detectado 4 habilidades clave sin las que es muy complicado que este tipo de proceso salga adelante.

Tanto nuestro curso de Change Makers como en el de Product Lab, hacemos mucho hincapié en el desarrollo de estas habilidades (entre muchas otras) ya que, para nosotros, son un must para crear productos que realmente marquen la diferencia y, especialmente, para que estas habilidades calen en las organizaciones, y se produzcan cambios reales tanto la cultura como la forma de trabajar.

Nos enfrentamos a nuevos retos y, por lo tanto, debemos desempeñar nuevos roles y desarrollar nuevas competencias

 

Empezar definiendo bien un reto

Es de lo más habitual, que cuando empezamos un proyecto, pasamos demasiado pronto a la búsqueda de soluciones, cuando  ni siquiera tenemos un problema bien planteado al que dar respuesta.

Por eso, es imprescindible de comenzar cualquier proceso creativo definiendo bien ese reto inicial que nos guiará en todo momento, además de que podremos enfocar dicho proceso de una forma u otra según su naturaleza.

Herramientas útil: Mapa de empatía

 

Respetar los momentos de divergencia

Como dice nuestro profe de Change makers, Jesús Carreras,  la clave es “ stop frases matadoras”. Cuando estamos en un momento de divergencia,  es decir, estamos abriendo nuestra mente en búsqueda de soluciones y posibilidades,  no podemos entrar  en juicios del tipo “ eso no se puede hacer”, “ eso es imposible”… decir ese tipo de frases.

Así que debes asegurarte que todo el equipo esté respetando estos momentos divergentes para explorar posibilidades y abrirse a nuevos planteamientos y perspectivas.

Herramienta útil: hibridación.

 

Ten claros los criterios

En pleno proceso creativo es normal que entre la duda sobre qué solución es mejor que otra, especialmente, si tenemos muchas encima de la mesa.

¿Solución para esto? Antes de entrar en nuestra búsqueda de soluciones, fijemos unos criterios claros que luego nos van a ayudar a decidir sobre cual es la opción se acerca más al resultado deseado.

Esto es un ejercicio que debe hacerse en equipo, y que todos deben estar alineados con  estos criterios.

Herramienta útil: IDOAART (para alinear equipos y fijar criterios)

 

Experimenta

Algo que también pasa mucho, es que nos quedamos en la solución teórica y, con eso, nos sentimos satisfechos…  cuando, en realidad, debemos probar antes si nuestra solución va por la dirección adecuada o si, por el contrario, estamos completamente equivocados.

Para esto, es imprescindible la experimentación. Poner a prueba nuestra hipótesis, es decir, la solución a la que lleguemos ya que, hasta que no la pongamos a prueba, es tan solo eso, una hipótesis. Así que el proceso se queda incompleto si no se hace un experimento en busca de mejoras a esa solución hipotética inicial.

Herramienta útil: mínimo producto viable (MVP)

 

Ya está aquí en nuestras cuatro claves recomendadas de hoy.

¿Tienes alguna más? ¿Te gustaría que escribiésemos un post sobre algunas de las herramientas que hemos recomendado arriba? ¿Cuál de ellas?

Pide por esa boquita. Mejor dicho, pide por ese teclado.

 

Escribir un comentario